El reportaje familiar va más allá de guardar fotos para ojear al cabo del tiempo. La fotografía familiar deja constancia de nosotros y nuestras emociones a las siguientes generaciones. En nuestro reportaje se verá nuestro ambiente, nuestra moda, en definitiva: nuestra historia.
Una tarde de cumpleaños, una excursión o una mañana del fin de semana son buenas excusas para realizar un reportaje familiar íntimo y personal. Os acompañaré varias horas para fotografiar de una forma natural vuestra vida. En este enlace podéis ver un ejemplo de este tipo de fotografía. Hugo acaba de llegar al mundo y la vida de dos jóvenes acaba de cambiar.
Otros reportajes que me encantan son los de nuestros peludos. Los que tenemos mascotas sabemos que son uno más y tienen que tener su sitio en nuestra historia. Aquí Portos : )
También podéis tener unos retratos familiares de calidad, con un toque de humor realizados en estudio con luz dirigida y un entorno muy cuidado. Retratos que complementan muy bien el reportaje íntimo del que os hablaba antes.